Esta facultad está protegida con medidas de seguridad electrónicas

En otras palabras, es domingo, estoy en la facultad, y he bajado a por un café de máquina por el camino que tomaría cualquier otro día, es decir, por el pasillo trasero. Mientras la máquina hacía mi café el hombre de seguridad me ha instruido sobre los sistemas de seguridad de la facultad. Me dijo que había hecho saltar tres alarmas en mi camino, y que se había activado el sistema anti-intrusiones, y que si no hubiera supuesto que había sido yo me podría haber encontrado con cuatro gorilas armados tratando de reducirme... Es el plan de seguridad de los fines de semana.

Naturalmente, entre semana, cualquiera puede entrar por cualquier puerta, llevarse ordenadores, y salir sin levantar las más mínimas sospechas. Son las peculiaridades de las medidas de seguridad electrónicas.

Sábado desde el 338

El despacho tiende a convertirse en una segunda casa (casi en una primera, relegando la otra a segunda), y he aquí que estoy en sábado en la facultad, intentando concienciarme de ponerme a trabajar en algo productivo en vez de juguetear con el ordenador y en internet.